Hay una plaga en el hombre: su opinión de que sabe algo

¿Michel de Montaigne? Carlos Algodón? M. A. Chillido? ¿Apócrifo?

540Estimado presupuesto Investigador: El exceso de confianza es uno de los grandes defectos de la humanidad. Ganar el dominio de un tema es a menudo bastante difícil. Aquí hay un comentario pertinente:

 

Hay una plaga sobre el Hombre: su opinión de que sabe algo.

El destacado filósofo francés Michel de Montaigne ha recibido crédito por este dicho. ¿Podría ayudarme a encontrar una cita?

Cita del investigador: Michel de Montaigne comenzó a publicar sus famosos ensayos en la década de 1570. Continuó creando, revisando y publicando los ensayos hasta el momento de su muerte en 1592. La obra titulada “Apologie de Raymond de Sebonde” (“Disculpa por Raimond Sebond”) contenía el dicho bajo examen. El siguiente texto y ortografía es de una edición de 1652. Negrita añadida a extractos de AN:

 

La peste de l’homme c’est l’opinion de sçauoir. Voila pourquoy l’ignorance nous est tant recommandée par nostre Religion, comme piece propre à la creance et à l’reverencia.

Las oraciones anteriores han sido traducidas al inglés por M. A. Screech de la siguiente manera:

 

Hay una plaga sobre el hombre: su opinión de que sabe algo. Por eso nuestra religión defiende con tanta fuerza la ignorancia como una cualidad propia de la creencia y la obediencia.

Aquí hay citas seleccionadas adicionales en orden cronológico.

Charles Cotton creó una traducción de “Apology for Raimond Sebond” de Montaigne, y el extracto ampliado a continuación proporciona un contexto adicional para la cita. Este texto es de una edición publicada en 1842. El segundo párrafo alude a la historia bíblica del Génesis de la tentación de Adán y Eva por una serpiente. También hace referencia al cuento de Homero sobre la tentación de Ulises por parte de las Sirenas. La frase que comienza con “Eritis sicut” está en latín:

La primera ley que Dios le dio al hombre fue una ley de pura obediencia; era un mandamiento desnudo y simple, en el cual el hombre no tenía nada que investigar, ni disputar; pues tanto como obedecer es oficio propio de un alma racional, reconociendo a un celestial superior y benefactor.

De la obediencia y la sumisión brotan todas las demás virtudes, como todo pecado de la opinión propia. Y, por el contrario, la primera tentación que el demonio ofreció a la naturaleza humana, su primer veneno se insinuó en nosotros por la promesa que nos hizo del conocimiento y de la sabiduría: Eritis sicut Dii, scientes bonum et malum. “Seréis como dioses, sabiendo el bien y el mal”. Y las sirenas, en Homero, para seducir a Ulises y atraerlo al peligro de sus lazos, se ofrecieron a darle conocimiento.

La plaga del hombre es la opinión de la sabiduría; y por eso es que la ignorancia nos es tan recomendada, por nuestra religión, como propia de la fe y la obediencia.

A continuación se muestra un extracto de la traducción de M. A. Screech publicada en 1987:

 

La primera tentación vino a la humanidad desde el extremo opuesto: el Diablo primero derramó su veneno en nuestros oídos con promesas sobre el conocimiento y la comprensión: ‘Eritis sicut dii, scientes bonum et malum’ [Seréis como dioses, sabiendo el bien y el mal]. En Homero, cuando las sirenas quisieron engañar a Ulises, atraerlo a sus peligrosas trampas y destruirlo.a él, le ofrecieron el don del conocimiento.

Hay una plaga sobre el hombre: su opinión de que sabe algo. Por eso nuestra religión defiende con tanta fuerza la ignorancia como una cualidad propia de la creencia y la obediencia.

En conclusión, Michel de Montaigne debería recibir crédito por este dicho que apareció en su ensayo “Apologie de Raymond de Sebonde” alrededor de 1580. Hay varias versiones diferentes al inglés. Dos se dan arriba.

Notas de imagen: pintura de “Las sirenas” por Edward Burne-Jones. La imagen ha sido recortada y redimensionada.

(Muchas gracias a Peter Vilters cuya investigación llevó a AN a formular esta pregunta y realizar esta exploración).

Notas:

  1. 1652, Les Essais de Michel, Seignevr de Montaigne, Novvelle Edition, Livre Second (Libro 2), Chapitre 12 (Capítulo 12): Apologie de Raymond de Sebonde, Página de inicio 313, Cita Página 353, Chez Edme Covsterot, ru&euml ; Saint Iacques, París. (Google Books Vista completa)
  2. 1987, An Apology for Raymond Sebond de Michel de Montaigne, traducido y editado por M. A. Screech, Libro 2, Capítulo 12, Cita página 53, Penguin Classics: Penguin Books, Londres, Inglaterra. (Verificado con escaneos)
  3. 1842, Las Obras Completas de Michael de Montaigne por Michel de Montaigne; Editado por William Hazlitt, The Essays, Traducido por Charles Cotton, Capítulo 12, Apología de Raimond Sebond, Cita en las páginas 223 y 224, Publicado por John Templeman, Londres. (Google Books Vista completa)
  4. 1987, An Apology for Raymond Sebond de Michel de Montaigne, traducido y editado por M. A. Screech, Libro 2, Capítulo 12, Cita página 53, Penguin Classics: Penguin Books, Londres, Inglaterra. (Verificado con escaneos)